El próximo tope de línea Comet Lake-S para plataformas de escritorio, estaría presentando un pequeño problema técnico: Su consumo de energía sería mucho mayor al esperado.
Con 10 núcleos, 20 hilos y hasta 4,9 GHz de frecuencia turbo, el próximo CPU tope de línea de 14 nm que lanzará Intel estaría atrasando un poco los planes, ya que su consumo estaría pasando la barrera de los 300W.
Esta información fue obtenida por el sitio ComputerBase, al entrevistar a diferentes fabricantes de placas madre que se encontraban en el CES 2020. Según indican, ellos concuerdan en que las placas están listas, pero que Intel ha retrasado el lanzamiento de la presentación de este producto por los problemas descritos.
300W o un poco más de consumo no suena descabellado, más si consideramos que el Core i9-9900KS alcanza incluso hasta 275W en las cargas de trabajo más exigentes.
Intel omitió referirse a esta nueva generación de procesadores en el CES 2020, por lo que solo nos queda esperar para saber más sobre Comet Lake-S y las nuevas placas madre con chipset Z490.
Fuente: computerbase.de