Review: Refrigeración líquida Corsair Hydro Series H100i

El verano poco a poco se acaba desde nuestro lado del globo pero nace vigoroso desde la otra parte del mundo, sin dar tregua alguna a los fogosos componentes que yacen dentro de nuestras máquinas. Siguiendo este eterno ciclo es prudente preocuparnos de las partes íntimas y más importantes de nuestro equipo, específicamente los procesadores -sean de cálculo o gráficos- siguen siendo los puntos de calor más críticos de la máquina. Bajo este escenario Corsair nos presenta una de sus últimas soluciones basadas en refrigeración líquida, doble radiador y la interesante función de control y monitorización por software; los invitamos cordialmente a conocer el watercooling Corsair Hydro Series H100i, ¡sólo en Ozeros!.

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Otra solución “todo en uno” para nuestros procesadores

El tiempo ha dado la razón y Darwin se regocija en su tumba al comprobar que la evolución natural en refrigeración se quedó finalmente en los sistemas watercooling; desde los ostentosos sistemas personalizados, del que podemos elegir cada detalle incluso en sus tornillos y colores, hasta lo que vemos el día de hoy, donde la mayoría de los fabricantes, año tras año, renuevan y eliminan sus tradicionales líneas de disipación basadas en grandes porciones de metal por lo que tenemos en frente, disipadores basados en ciclos cerrados de agua y de lo que no tenemos que hacer mantención alguna.

El catálogo es bien extenso y cubre todo tipo de necesidades, separando lo que ofrece el montón frente a los detalles que algunos fabricantes se esmeran por hacer brillar en sus versiones. Así mismo ha ocurrido con Corsair, firma basada en California, que luego de tres generaciones en watercoolings todo-en-uno termina por presentarnos sus nuevos productos incluyendo la tecnología Corsair Link para controlar y monitorear en vivo todos los aspectos de este dispositivo.

Familia de disipadores Hydro Series con apellido “i”

Luego de presentar la primera camada de watercoolings, que no eran más que el mismo kit ofrecido por varias marcas renombrado con su propio logotipo, Corsair anuncia la segunda generación de sistemas de refrigeración líquida mejorando notablemente el modo de instalación y anclaje del mismo. Ahora, mientras revisamos la tercera generación de equipos WC (año 2014), Corsair imprime su propia identidad dotando de características vistas en otro tipo de productos con tal de complementar el ecosistema Corsair Link, algo así como un software definitivo para controlar en tiempo real todos sus productos que incluyen este add-on; como memorias RAM, fuentes de poder e iluminación.

Si bien existe un panel externo opcional que podemos adquirir para dotar de esta tecnología a nuestra máquina, los productos que incluyen esta función per se son los siguientes:

Memorias RAM

• Corsair Dominator Platinum: Monitoreo de voltaje y temperatura de chips.
• Ventilador Dominator Airflow Platinum: Control PWM y elección entre 16,8 millones de colores

Fuentes de Poder

• Corsair AX760i, AX860i, AX1200i y AX1500i: Monitoreo de voltajes, eficiencia, ventilador, temperatura y funcionamiento en una o multi líneas.
• Corsair HX750i, HX850i, HX1000i y HX1200i: Mismas funciones anteriores.

Refrigeración Líquida

• Corsair Hydro Series H100i GTX (línea 2015): Modifica el rendimiento, revisar temperaturas de líquido y CPU, y cambia el color del logotipo.
• Corsair Hydro Series H110i GT y H80i GT (2015): Mismas funciones anteriores
• Corsair Hydro Series H100i y H80i: Revisión de temperaturas, control de iluminación y rendimiento de ventiladores.

El invitado del día: Corsair Hydro Series H100i

Para conocer un poco más el producto en cuestión los dejamos con la siguiente tabla de especificaciones:

Corsair Hydro Series H100i frente a la cámara

Distribuido en un abultado empaque, el Corsair H100i se presenta en una firme caja que anuncia parte de sus características en variados idiomas; desde su compatibilidad principal con AMD e Intel, soporte de tecnología Corsair Link, especificaciones técnicas y una que otra leve comparativa contra el disipador estándar entregado por Intel… Adivinen, ¡es mejor que este último!.

La disposición de los accesorios recuerda demasiado a lo que ya se ha visto en otros sistemas de refrigeración líquida de este tipo. No queremos sugerir que sea el mismo fabricante de fondo, ya que obviamente Corsair renombra este producto con su propia marca, pero la manera en que viene todo empacado nos recuerda mucho lo que viene ofreciendo el omnipresente Asetek o CoolIt en otras de sus versiones.

De todas formas, podemos ver que todo viene debidamente asegurado y ordenado, garantizando que nuestro producto y su set de accesorios lleguen en perfectas condiciones a nuestra máquina.

Dentro de su extenso bundle podemos encontrar todo lo necesario para montar la solución en cualquier plataforma actual AMD e Intel, incluso en la última LGA 2011-3, el que se apoya principalmente en un conveniente y cómodo sistema magnético para ajustar el bloque en el zócalo de la placa madre. Además tenemos los dos ventiladores SP120L, sus respectivos tornillos para ajustar en el radiador así como los tornillos para anclar este último en el gabinete. Por último se incluyen los cables necesarios para utilizar el sistema Corsair Link y, naturalmente, encontramos el imponente H100i.

Y acá finalmente el Corsair H100i en toda su extensión y con el vistoso radiador “doble”, el cual acepta dos ventiladores de 120 mm por lado, su bloque con bomba integrada y las mangueras que completan el sistema todo en uno.

Si bien Corsair asegura que el H100i tendrá un calce perfecto en todo gabinete con soporte de dos ventiladores en su parte superior (2×120 mm), en la práctica algunos gabinetes pueden quedar demasiado ajustados al momento de instalar el radiador ya que chocan con la parte superior de la placa madre. De acuerdo a la experiencia podemos decir que no hay problema de instalación en los propios gabinetes de Corsair, que son bien espaciosos y organizados, pero no se asegura que así sea en otras marcas. Como consejo final ten especial precaución en que el espacio entre el techo -donde irá instalado el Corsair H100i- y la placa madre sea de, por lo menos, unos 18 milímetros.

Otra de las diferencias frente a generaciones anteriores se puede apreciar en las tuberías ocupada en el H100i, las que ahora tienen un mayor diámetro, dureza y menor impermeabilidad, asegurando el mínimo de evaporación durante todo su ciclo de funcionamiento. Está demás decir que este tipo de sistema de enfriamiento líquido no necesita mantención alguna durante toda su vida útil.

En esta versión se mantiene el simple sistema de anclaje dotado de un efectivo y casi mágico sistema magnético: De esta manera, si estamos instalando el bloque en nuestra máquina ya armada, nada se soltará ni saldrá de su lugar.

Desde este mismo punto nace prácticamente toda la conectividad desde la bomba de agua hacia la parte lógica de nuestro equipo: A la izquierda, podemos ver que desde uno de los costados de la bomba conectaremos el cable USB tipo mini-B que a su vez llega a uno de los conectores USB 2.0 internos en la placa madre, esto para dar el soporte al software Corsair Link. Por la imagen derecha tenemos los dos conectores para los cables en Y incluidos, que dan la posibilidad de conectar hasta 4 ventiladores en la misma bomba. Muy cómodo si es que no tenemos los conectores 3/4-pin PWM disponibles en la placa madre.

Además de comunicación también necesitamos energía, ya que desde este mismo punto podemos encontrar el cable de poder SATA y el conector PWM (sólo un cable para monitoreo) que conectaremos en la fuente de poder y otro en la placa madre, respectivamente.

No es la forma ideal pero también se incluye pasta disipadora pre-instalada desde la fábrica. Hubiese sido mucho mejor que Corsair entregase una jeringa o una variante similar con la pasta totalmente independiente del sistema. También podemos ver que la terminación en la superficie de contacto del bloque no es tipo espejo, más bien es opaca pero totalmente regular.

Por el otro extremo, ya en el radiador, vemos que la disposición de sus aletas (fin en inglés) corresponde al formato de alta restrictividad, optimizado y logrando mejores resultados en ventiladores con alto flujo de aire.

Cerrando lo que es el bloque-bomba del Corsair H100i podemos ver que las salidas o codos que compone el sistema tienen cierto nivel de rotación a pesar de ser en extremo firmes para girar. Recomendamos hacerlo con mucho cuidado.

Dos ventiladores PWM vienen incluidos y corresponden al modelo SP120L, ambos en color negro-gris. Según Corsair, estos ventiladores cuentan con un diseño personalizado para mejorar la presión estática y entregar una mayor relación entre rendimiento/ruido. Su flujo de aire máximo se encuentra en los 77 CFM a un nivel sonoro de 37,68 dBA, mientras la presión estática para cada ventilador es de 4 mm/H2O.

Instalación del Watercooling

El Corsair H100i incluye todo lo necesario para ser instalado tanto en plataformas AMD, sea FM2 o AM3+, como también en los sockets LGA 1150, 1155, 1151 y LGA 2011-3 de Intel. En general nos referimos a cualquier plataforma actual al año 2015.

En este caso daremos el ejemplo bajo la plataforma LGA 2011-3 -que no tiene nada distinto al LGA 2011 a secas– mientras que para sus símiles de AMD o el mismo Intel, daremos los datos más abajo.

1. Montaje de soportes con rosca M3

El socket LGA 2011 y LGA 2011-3 incluye un completo y firme anclaje que ya integra las roscas correspondientes para instalar un sistema de refrigeración. En primer lugar pondremos los tornillos base (con el lado más grueso que el otro) en cada una de las cuatro esquinas del zócalo.

2. Presentación del bloque en socket

Teniendo en cuenta que el anclaje de la bomba se afirma por sí solo al ser magnético, sólo debemos introducir los 4 tornillos del socket en los orificios del anclaje, sin antes olvidar haber aplicado pasta disipadora entre el CPU y la base del disipador.

3. Paso final: Instalación de arandelas y pernos

Teniendo el bloque inserto en el socket, sólo nos falta asegurar todo por medio de las cuatro arandelas y pernos que instalaremos tal como se ve en la imagen. Instalamos cada una de ellas de manera cruzada para obtener una dispersión prolija y nivelada del material térmico graso entre las superficies de metal.

Opcional: Conectividad con Corsair Link

Para obtener toda la información de control y estatus de la máquina en el software Corsair Link, es necesario conectar este cable USB tipo mini-B desde el bloque hacia la placa madre mediante un conector USB interno (que nos hará perder la posibilidad de expandir los puertos USB 2.0 en dos unidades) disponible en cualquier tipo o modelo de placa actual.

Instalación en sistemas AMD o Intel LGA 1150/1151/1155/1156

Para la instalación en sistemas AMD, sean FM2 o AM3+ por ejemplo, usaremos el anclaje magnético con dos pestañas, los dos ganchos de tensión y finalmente dos pernos para aplicar presión al sistema. Esto lo podemos ver en la imagen izquierda más abajo…

Mientras que para el sistema Intel LGA 1150/1151 (próximo socket)/1155/1156 usaremos el mismo anclaje magnético que usamos en LGA 2011-3/2011 y los pernos de sujeción final, además de usar el backplate y los 4 tornillos que se incluyen en los accesorios.

Utilizando el software Corsair Link

La mayor diferencia en esta generación de watercoolings Corsair es que se agregó esta nueva funcionalidad para tener control y visualización en tiempo real de algunas funciones en el dispositivo, así como también de la temperatura, velocidad y estado en procesador, placa madre, unidades de almacenamiento, tarjeta gráfica y en general todo lo que incluya sensores de lectura.

Al entrar al software Corsair Link se desplega lo que debería ser una infografía o diagrama de un equipo con componentes dentro (de la cual no vemos nada) pero que también podemos revisar a la izquierda: Desde el CPU hasta el disipador en el extremo inferior, pasando por placa, discos y gráficos. Como pueden ver, al tener registros fuera de lo común, el software advierte en primer lugar con el símbolo en color rojo, además de poder configurar una serie de acciones que veremos más adelante.

De la ventana anterior es posible elegir componente a componente, e ir categorizando cada uno de ellos en grupos de interés común (por ejemplo en la imagen derecha tenemos todo lo relacionado al Corsair H100i). Si bien es una ordenada forma de segmentar todos los componentes, en la práctica se forman tantas categorías vacías -sin poder eliminarlas- que se desperdicia espacio sin uso en toda esta pantalla (ver imagen izquierda).

Si hacemos doble click en cada uno de estos iconos informativos se abre la configuración del mismo, donde por ejemplo, podemos revisar el sensor ubicado en la bomba de agua y que calcula la velocidad de ésta expresada en RPM.

Podemos asignar un nombre, tipo de dispositivo, “grupo” (para ubicar en las ventanas anteriores), asignar máximos, mínimos, y por último una serie de acciones a modo preventivo en el equipo.

Así mismo, siguiendo la tendencia a colorear todo en nuestra máquina, también se puede configurar el LED RGB ubicado en la bomba con un color fijo, como pulso, cíclico entre dos tonos o asignar colores de acuerdo a la temperatura, algo que realmente sí puede ser funcional.

En la tercera pestaña “Gráfico” evidentemente podemos tener toda esta información expresada visualmente, agregando todas las variables posibles. Así mismo este ejercicio se puede hacer con la lectura de RPM en bomba y ventiladores.

Vale mencionar el detalle en la lectura de temperatura para el procesador Core i7-5960X, el que a ratos mostraba unos imposibles 0 grados Celcius a temperatura ambiente.

Finalmente tenemos todo el apartado necesario para configurar y establecer parámetros en el sofrware Corsair Link. Dentro de estas Opciones indicamos el inicio del mismo junto al sistema, establecer la unidad de medida, perfiles personalizados y otro detalle no menor donde podemos guardar el log o registro de temperaturas y ventiladores.

Metodología de Pruebas

Optimizado y todo, pondremos a prueba el watercooling de Corsair frente al CPU para escritorio más potente de la firma azul, el todopoderoso Core i7-5960X con sus 16 hilos de procesamiento y esos temibles 140 Watts de TDP. Todo el hardware que complementa la máquina va con agradecimiento especial a GIGABYTE y Kingston, quienes con su ayuda mantienen en pie nuestro equipo de pruebas mes a mes.

“Los resultados serán comparables solamente si se ha utilizado el mismo hardware en las pruebas.”

Metodología de pruebas

Para las pruebas de este disipador mantendremos la máquina dentro de una habitación típica cerrada, con temperaturas entre 20 y 25 grados durante toda la jornada de benchmarks. Además, usaremos el disipador tal como fue pensado para ser utilizado, esto quiere decir con todos sus accesorios, conexiones y ventiladores activos en velocidad automática (PWM), y bajo las siguientes configuraciones:

• CPU default: Procesador Core i7-5960X @3.500 MHz 1,068 Volt – TDP 140 Watts.
• CPU OC: Procesador Core i7-5960X @4.400 MHz 1,325 – TDP 350 Watts aproximadamente.

Para finalizar y complementar esta revisión agregaremos dos ventiladores de 120 milímetros más a la ecuación, ajustándolos por la cara contraria a los ventiladores Corsair SP120L para quedar con un total de 4 ventiladores. Teniendo esta configuración ideal procederemos a correr nuevamente las pruebas:

• Bonus track: Corsair H100i con 4 ventiladores de 120 milímetros.

Los demás componentes, como tarjetas gráficas y memorias por ejemplo, quedarán configurados a sus velocidades de fábrica.

Resultados

Separamos la tanda de pruebas de acuerdo a la velocidad utilizada en el procesador, la que va desde los 3.500 MHz -modo Turbo Boost del Core i7-5960x- hasta llegar a los 4.400 MHz, velocidad límite y aún sana para ejecutar la batería de pruebas.

Considerando que aún quedan vestigios del verano por este lado del globo, alcanzar un máximo de 44,2 °C en una prueba de alta exigencia más llevada a la realidad es bastante prometedor. Al ir un poco más allá, en la sobrecargada prueba de LinX (que está muy lejos de lo que se podría encontrar en un programa de uso real) obtenemos unos tranquilos 61,1 °C mientras usamos el sistema bajo carga. Estos números son totalmente adecuados si pensamos en el tremendo TDP de este procesador.

La tercera generación de procesadores LGA 2011 advierte un máximo de 89°C como tope de temperatura, mucho menos que los 100~105 °C que admite la serie LGA 1150. Pues bien, para lograr una temperatura sana y poder terminar correctamente la ronda de pruebas debimos fijar como máximo una frecuencia de 4.400 MHz en el CPU, un Vcore de 1,325v y muchas esperanzas de no quemar la máquina… Bueno no tanto, ya que el Corsair H100i pudo mantener una temperatura sana al renderizar la imagen computarizada en Cinebench R15. No así su competidor que llegó muy cerca del máximo teórico del 5960X.

Sin embargo, al cambiarnos al inhumano software LinX se vieron los verdaderos pesos pesados. En conclusión, el Corsair H100i logra pasar los 20 minutos de benchmarking con el alma en un hilo y peligrosos 89 °C en varios de sus 8 núcleos físicos. Como pueden ver, el Thermaltake 3.0 Pro se queda corto con su formato “single” y no pasa las pruebas.

Según averiguaciones esto no es nada raro en esta exigente serie de procesadores ya que para un uso 24/7 a 4.500 MHz se pide encarecidamente utilizar un sistema watercooling de 3 espacios – o triple – mientras que un sistema de doble espacio queda reservado para una velocidad aproximada de 4.200 MHz y 1,25~1,3 Volts.

Bonus: Corsair H100i + 4 ventiladores

Aprovechando la oportunidad agregamos un segundo par de ventiladores a la cara contraria del H100i y corrimos nuevamente las pruebas con overclocking en el procesador.

El resultado, no mucho mejor que lo visto anteriormente con los dos ventiladores de fábrica ya que apenas se logra bajar unos cuantos decimales en la prueba de Cinebench R15 y también se tocan los 89°C en LinX, sin mencionar que aumenta notablemente el nivel de ruido en el equipo llegando al punto de ser molesto.

¿Vale la pena un WC todo-en-uno?

Teniendo presente la situación actual y el mercado de soluciones para refrigerar nuestros equipos, sí, vale la pena completamente pasarse a un watercooling sea para nuestro CPU y/o GPU. Ahora bien, la pregunta que nos trae a esta revisión es, ¿vale la pena un Corsair H100i?.

Corsair nos hizo llegar uno de sus últimas soluciones para refrigerar procesadores en formato de doble radiador, dual, de 240 mm o como quieran llamarle, el Corsair H100i, integrando la funcionalidad de su ecosistema Corsair Link para tener mayor información y control en el mismo. Si bien el software pinta para ser de utilidad, en la práctica carece de un orden más lógico además de presentar las típicas deficiencias de conexión con el hardware. Por ejemplo, tenemos todo configurado y ordenado, reiniciamos la máquina y aleatoriamente se desconecta y pierde la personalización previa.

En cuanto a la construcción no hay mucho que decir en contra, Corsair mejoró notablemente el sistema de anclaje y mangueras a lo que pudimos ver mucho tiempo atrás en los modelos H80 y H100 a secas, ahora incluso da gusto montar un sistema así de fácil y el par de mangueras inspiran seguridad. Lo mismo para bloque y radiador, donde el acabo y detalles es sencillamente impecable.

Y finalmente lo que nos convoca, el rendimiento: Hacemos un punto aparte para destacar la exigencia de los componentes probados, ya que manejar 140 Watts de TDP no es cualquier cosa, y más aún si aumentamos las frecuencias del procesador para llegar a la impresionante suma de 350 Watts de TDP saliendo desde esos 16 hilos de procesamiento. Es un escenario en extremo exigente para cualquier solución de disipación.

El Corsair H100i maneja notablemente las temperaturas del CPU ni bien conectamos todo a su velocidad de fábrica, pudiendo calmar las pasiones del 5960X dentro de rangos térmicos aceptables -entre 40 y 60 grados- y un ruido más que agradable al mantener los ventiladores regulados automáticamente (PWM). Esto cambia cuando pasamos al caso extremo llegando a los límites físicos de los 240 mm de radiador y del bloque mismo, tocando el límite que Intel fijó para sus procesadores LGA 2011-3, 89 ° Celcius, además de llegar a niveles poco amistosos de ruido. Pero no hay que desilusionarse, LinX nos pone en situaciones que ningún programa de uso doméstico podría llegar, incluso los más exigentes juegos, soluciones de renderización o creación de contenido.

En resumen, el Corsair Hydro Series H100i pasó la exigente batería de pruebas demostrando valentía y soberbia al manejar el incontrolable Core i7-5960X en altas velocidades. Su construcción de primer nivel mantiene la tendencia que Corsair viene mostrando año tras año aunque sólo faltaría pulir el software que nos ayuda a administrar y controlar todos los detalles ambientales del equipo.

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